sábado, 24 de noviembre de 2012

INDULGENCIAS EN NUESTRA DIÓCESIS DE OBERÁ, POR EL "AÑO DE LA FE"



Nuestro padre obispo Damián Santiago Bitar comunica que por el "Año de la Fe", el santo padre, SS Benedicto XVI, concede indulgencias a todos los fieles que verdaderamente arrepentidos, debidamente confesados, hayan comulgado sacramentalmente y recen según las intenciones del Sumo Pontífice:


1-    Cada vez que visiten en peregrinación y participen en una ceremonia sacra, o al menos se recojan en oración durante un tiempo de meditación y concluyan con el rezo del Padre Nuestro y las invocaciones a la Virgen María y la Profesión de Fe en cualquier forma legítima en los siguientes lugares:

·        Iglesia Catedral “San Antonio de Padua”, Oberá
·        Santuario Ntra. Sra. de Schoenstatt, Oberá

2-    Cada vez que en los días determinados a continuación, participen en cualquier
lugar sagrado (Iglesias, Capillas, Oratorios, Cementerios) en la celebración Eucarística o en la Liturgia de las Horas, añadiendo la Profesión de Fe:

·        En la Solemnidad de la Inmaculada Concepción
·        En las Misas de Noche  Buena y Navidad
·        En la Solemnidad de la Madre de Dios
·        En la Epifanía
·        El Miércoles de Cenizas
·        En la Misa Crismal
·        En la Solemnidad de San José
·        El Domingo de Pascua
·        El Segundo Domingo de Pascua o de la Misericordia Divina
·        El Domingo de Pentecostés
·        En la celebración de clausura de  la Fiesta Patronal
·        En las Misas de Primeras Comuniones y Confirmaciones
·        En las Ordenaciones diaconales y sacerdotales
·        En la Solemnidad de Cristo Rey

3-    Un día elegido libremente durante el Año de la Fe para visitar el baptisterio o cualquier otro lugar donde recibieron el sacramento del Bautismo, si renuevan las Promesas Bautismales de cualquier forma legítima.

4-    Los fieles que por enfermedad o justa causa no pueden salir de casa o del lugar donde se encuentren, podrán obtener la Indulgencia Plenaria, si “unidos con el espíritu y el pensamiento a los fieles presentes, particularmente cuando las palabras del Sumo Pontífice o los Obispos diocesanos se transmitan por radio o televisión, recen, allí donde se encuentren, el Padre Nuestro, la Profesión de Fe en cualquier forma legítima y otras oraciones conforme  la finalidad del Año de la Fe ofreciendo sus sufrimientos o problemas de su vida”.

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